La fe, la devoción y el entusiasmo se hacen evidente el 29 de septiembre, cuando se le rinde homenaje a este protector celestial en el mundo entero.
Angeles, arcángeles, esos seres celestiales que sirven de puentes entre el reino espiritual y el físico, han estado presentes en todas las corrientes religiosas y culturas de todos los tiempos. ¿Quién no ha hecho alguna vez una oración sentida a un ser espiritual? Incluso la mayoría de los que no creen en ninguna divinidad, apelan a una oración o piden ayuda de alguna otra manera en momentos de emergencia; son pocos los incrédulos que ante la muerte de un ser querido no optan por algún rezo para su alma. Sea a través de algún santo, buda, espíritu o ángel, la inclinación del ser humano a buscar la ayuda espiritual es parte de su naturaleza. En la amplia gama de seres a los que se acude por ayuda, los ángeles y arcángeles figuran entre los más populares.
“Eres un ángel”, “es angelical”… las palabras relacionadas con el término ángel están por doquier, así como sus imágenes y representaciones. La palabra ángel, derivada del griego angelos que significa “mensajero de Dios”, se utiliza como término genérico para referirse a todos los seres celestiales, pero también para designar a los miembros de una de sus categorías.
Existen numerosas opiniones en cuanto a la clasificación de estos seres. El sistema de organización más común es el que se le atribuye a Dionisio, discípulo de San Pablo. En él figuran tres esferas de ángeles, con tres rangos en cada una. La esfera más cercana a la humanidad está conformada por Angeles, Arcángeles y Principados; la segunda por Potestades, Virtudes, Dominios. En la tercera, la más “elevada”, se ubican los Tronos –los guardianes de los planetas; los querubines –conocidos como los custodios de la luz; y los serafines que desde el orden más próximo al Creador regulan el movimiento de los astros en los cielos.Los arcángeles, o seres superlumínicos, son numerosos. El Corán del Islam sólo reconoce cuatro y en realidad nombra únicamente a dos: Jibril (Gabriel) y Miguel. Aunque las fuentes cristianas y judías concuerdan en que son siete, figuran con regularidad solamente cuatro de ellos: Miguel, Gabriel, Rafael y Uriel; habiendo divergencias en cuanto a los nombre de los otros tres.Uriel, cuyo nombre significa “fuego de Dios”, es conocido como el arcángel de la salvación. Rafael, o “Dios ha curado”, es el encargado de la sanación. “Dios es mi fuerza” es el significado del nombre Gabriel, quien anunció a María la llegada de Jesús.
¿Quién como Dios?Esta pregunta encierra el significado del nombre Miguel. Este arcángel es reconocido en las tres principales tradiciones sagradas. En la mayoría de las fuentes cristianas Miguel es El Más Grande. De hecho, Miguel y Gabriel son los únicos dos nombrados en el Viejo Testamento. Según las escrituras Judías, fue Miguel quien se le presentó a Moisés en medio del zarza ardiente; fue el ángel que guió a Israel, a través del desierto. Fue Miguel quien le tomó la1
mano a Abraham cuando éste estuvo a punto de sacrificar a su propio hijo, Isaac. La tradición islámica lo describe con alas de color verde esmeralda, cubiertas con hebras azafranadas, cada una con un millón de rostros que en un millón de dialectos implora el perdón de Alá. En el Corán se dice que de las lágrimas derramadas por este grandioso arcángel por los pecados de los fieles se formaron los querubines. En los Pergaminos del Mar Muerto, Miguel es presentado como el Príncipe de la Luz, que libra una batalla contra los hijos de la oscuridad.
Hoy en día, el Arcángel Miguel es venerado por la principales religiones y numerosas corrientes espirituales, como la metafísica, la cábala y cientos de organizaciones que buscan la elevación de la conciencia humana. En los hogares de Venezuela es común ver una imagen de este protector encima o cerca de la puerta. Este Príncipe de las huestes celestiales es el protector de la fe en Dios. Representa la voluntad, la confianza, la fuerza y la protección divina. Se dice que hizo el juramento de permanecer en la Tierra hasta que la última de las almas se haya liberado y se haya elevado a la presencia del Creador. “Miguel es el encargado de los que mueren. Con su simbólica espada y sus legiones de ángeles azules, es el único que tiene permiso para internarse en ‘las tinieblas’ para libertar a las almas prisioneras de sus errores y que no tienen a nadie que ruegue por ellas”. El corta con su espada las ataduras que el hombre se ha creado con sus errores, señala Conny Méndez en su libro El maravilloso Número 7.
Los ángeles no tienen forma humana, ni sexo, ni alas; sin embargo, se presentan de una manera que sea comprensible y aceptable para los seres humanos. En la mayoría de las representaciones que se hace del arcángel Miguel, éste se muestra con una espada, cual comandante de los ejércitos de Dios que combaten la oscuridad.“El arcángel Miguel es un punto de unión de las religiones. En el mundo espiritual del planeta no hay ningún otro ser que unifique las principales religiones. Los islámicos no creen en Jesús, pero sí creen en Miguel. Los católicos no creen en Mahoma, poro sí creen en Miguel, los hebreos no creen en María ni en Jesús, pero sí en Miguel”, señala Luz Stella Rozo, pionera del movimiento angélico en Venezuela y escritora galardonada con el Hall of Fame Book Award de Estados Unidos en dos oportunidades en las categorías de libros de mejoramiento personal y religiosos.
“El mundo espiritual, que tiene la organización más perfecta, efectiva y más grande que jamás pueda existir, Miguel es el ser más importante después de Dios. Es como un vice-presidente, vice-primer ministro, de allí salen todas las órdenes. Es el príncipe de los tronos, de los arcángeles, de todos; es jefe de todos los coros,” agrega Rozo, quien además de varios otros libros sobre ángeles, escribió “Miguel, Príncipe de los Imposibles”. “Para Dios y su Arcángel Miguel nada es imposible, todo es posible si nos conviene. La gente a veces me pregunta ¿cómo le pido a Dios? ¿cómo le pido a Miguel? Les digo así como uno le habla a su madre…con toda humildad, sencillez, sinceridad. Que la oración a Miguel salga del corazón, eso es lo más importante”.
Para Angeles Rodríguez, pintora y especialista en temas de ángeles, “Miguel pertenece a las tres esferas y ostenta todos los títulos: es serafín, querubín, potestad, arcángel”.“Si bien es cierto que los ángeles saben qué es lo que necesitamos y requerimos, es importante, para ellos puedan tomar acción, que se los pidamos; porque los ángeles no pueden imponerse, no pueden trasgredir la ley del libre albedrio. Nuestros ángeles nos mandan señales, que tal vez captemos, pero sólo si pedimos ellos pueden intervenir directamente”.
Teresa León